VIDAS ENCORSETADAS

¿Será posible que la vida no sea tan difícil como nos la pintan? Puede ser, puede ser que no todo se rija por axiomas tan crueles como la equivocación, la culpa, la frustración, el perfeccionismo, el no hacer nunca lo correcto... De hecho, ¿puede que no exista lo correcto y lo incorrecto? Somos pequeñas figuritas de arcilla, moldeadas por un sistema que quiere, desea, le interesa, que funcionemos de una determinada manera... Pero, ¿y si ese no es el camino? ¿Y si todos tenemos un camino trazado que seguiremos independientemente de lo que decidamos, creamos, intentemos evitar? En ese caso la evitación, no existe. Errar no es más que el nombre que le ponemos al boceto que se dibuja de nuestro camino, al principio puede que angosto y oscuro, pero que nos llevará justo a donde teníamos que ir.

¿Y si todo este rollo místico no es más que otra sarta de tonterías que intentan manipular tu mente? Se pregunta mi Almudena oscura y escéptica, otros lo llaman ego o muñeco de arcilla. Todos moldeados por una sociedad que desea clasificar los sueños y suministrarlos con cuentagotas para de ese modo cortas tus alas, dejarte en tierra sin poder divisar el horizonte, siempre bello e inalcanzable. En un mundo desprovisto de esperanza, un mundo convencido de que no es capaz de crear sueños, de que perdió la capacidad de ser feliz por sus propios medios es más rentable que aquellos que saben ver la vida en cada poro de su propia piel, aquellos que son capaces de ver la magia en una pequeña flor delicada y bella, por el simple hecho de existir. No somos más que nuestros propios enemigos atacándonos constantemente, encapsulando pastillas de la felicidad hechas de banales bienes materiales, poniendo nombre a la tierra, dibujando líneas en el aire y vendiendo trozos de cielo. Estar aquí, ahora, en este momento, no puede ser por casualidad, la belleza de la naturaleza no puede ser una sucesión de casualidades, los colores no nacieron de la casualidad. La vida no es más que algo tan simple y maravilloso como el milagro de estar aquí, donde escogiste, donde debías estar, cómo y con quien debías vivirla. No te dejes engañar por un mañana hipotecado, no te dejes encorsetar por un pasado comisionado con cuotas de culpabilidad. Porque, ¿cómo le vendes aviones a alguien capaz de volar?

 

-Las peores cadenas son aquellas que llevan por ancla nuestra mente-
 

 

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