Muchos enemigos lo atacan y lo
infravaloran, desean dejarlo atrás, desean no volverlo a retomar. Pero el pasado,
siempre menospreciado, a veces evoca aromas de jabón, sabor a café y cigarro,
charlas infinitas sobre la encimera de la cocina, besos desgastados pero con un
nuevo sabor, mariposas adormecidas que vuelven a salir de su capullo, sonrisas conocidas
cuya melodía suena tan diferente…
Nuevas arrugas veo en tus ojos, tus comisuras parecen
más desgastadas, más reídas para otras, pero siempre parecen que estuvieron ahí
para mí. Tus manos encallecidas no parecen que tocaron otros cuerpos, ni que tus
ojos se perdieron en el pestañear de otras, parecían tan míos que nunca imaginé
que no lo fueran. Nunca he sabido amar de otra manera más que dándome entera, entregándome
a la causa, a esa batalla que decido que es mía y la hago propia, la lidio
bandera en mano, rebelde e independiente, divisando siempre la victoria. No se
amar de otra manera en este mundo en el que amar sin enigmas, en el que
entregarte sin censura parece un laberinto demasiado sencillo para aquellos que
se acostumbraron a enredarse en la dificultad. ¿Por qué amar ha de ser tan
complicado cuando amar es lo único con lo que nacemos aprendido? ¿Por qué
ocultarse? ¿Por qué privarse de amar por muy corto que sea, por muy intermitente,
intenso y fugaz que finalmente se dibujara?
Dejadme amar a mi manera, y
aprended a amar más fácilmente, aprended a abrazar sin comisión, a besar sin
cronómetro, a sentir sin condiciones. Hoy permitidme parar el tiempo, respirar
de nuevo, coger impulso y desafiando al presente, correr hacia el pasado, pues
el amor como el tiempo, se cuenta por instantes sin respirar, por anécdotas que
contar y por cicatrices que doler.
Me ha gustado tu reflexión Almudena. Me recordó "Reflexiones en la mesa" de Fernando Delgadillo.
ResponderEliminarSaludos
Gracias Gildardo, intentaré buscar ese texto que me indicas, me produce mucha curiosidad. Gracias por tus palabras y por seguir leyendo mis textos. Un saludo
EliminarAmar de esa manera que solo entiende el que ama, porque a veces el que recibe
ResponderEliminarese amor no sabe cuanto de inmenso lleva. ¡Hermosa reflexión!
Gracias Carmen, veo que has entendido perfectamente lo que quería transmitir. Gracias espero que me sigas leyendo. Un saludo.
Eliminar